La aventura de 5c
Era lunes, una mañana de colegio. En un colegio llamado La Salle Sagrado
Corazón, en la clase de 5c de primaria, todos estábamos en la fila para entrar
en clase, la primera hora. Entonces apareció Eduardo con una persona al
lado. Fuimos a clase. Cuando todos estuvimos sentados, nos presentaron a la
persona extraña:
Este es vuestro nuevo profesor de pruebas, Daniel-dijo Eduardo con voz
extraña-.
Viva Jesús en-empezó Andrea-.
No,-le corta Eduardo-hoy no rezamos.
A todos nos pareció muy raro.
Nos reunimos toda la clase en el patio de la mañana. Miriam dijo:
¿No os parece que Eduardo estaba muy raro? –pregunto-.
Si,- contesto David-está tan raro que no lo reconozco.
Y si, -se le ocurrió a África- nos portamos mal y nos castiga, entonces cuando se
Vaya (con Dani el profesor) podremos buscar pistas.
¡Buena idea!-grito a los cuatro vientos Raúl.
A la mañana siguiente nos portamos todo lo mal que podíamos:
Bea rompió el libro de notas del profe, Samuel insulto a Eduardo, Mónica tiro la
mesa encima del pie de Dani (el profe de prácticas), Aymán rompió los posters…
Eduardo se enfadó tanto que nos dijo que estaríamos castigados sin patio
para siempre. Hugo se asustó: Como sea el verdadero Eduardo la llevamos
clara-dijo.
Eduardo y Dani se fueron de la clase.
Es el momento de buscar pistas-dijo Mateo con voz misteriosa.
Si os dais cuenta todo esto empezó cuando llegó Dani el profe-añadió
Ana.
Tienes mucha razón –añadió Celia.
Tengo una idea –dije yo.
Entonces aparte las cajas de camisetas de la carrera y me metí debajo de la
pizarra.
¡Aquí hay un botón!-grite yo.
¡Púlsale, púlsale! – dijo Mario rápidamente.
Yo pulse.
Entonces sonó un sonido parecido al de cuando abrimos una puerta.
CHAK
¡Debajo de la mesa de Irene se abrió una escalera!
Apartamos la mesa.
¿Pasamos? Está muy oscuro –dijo Yago.
¡Sí! –grito Jasón decidido.
Bajamos las escaleras.
Nos encontramos una sala muy antigua con una cárcel y una persona dentro.
Nosotros sabíamos perfectamente quien era…
¡EDUARDO!
Entonces ese Eduardo no es de verdad –afirmó Dani.
¡Saquémosle de ahí!-gritó Espe.
Entre Paula y Alina consiguieron abrir la jaula.
Gabriel corrió para sujetar la puerta, pero se cerró de golpe.
¡Oh no! Estamos encerrados - gritó María.
Entonces Jorge sacó algo de su bolsillo ¡era su móvil! Voy a ponerlo en modo linterna
Jorge…- dijo Eduardo .
¡Tengo una idea!,-se le ocurrió a Diana - ¿y si todas las chicas cogemos
Nuestras horquillas y las usamos para intentar abrir la puerta? -dijeron a coro Andrea y Diana.
Funcionó.
Entonces vimos al falso Eduardo con Dani el profe.
Rápidamente, Jorge, sacó su móvil y llamo a la policía.
Pronto llegaron y se los llevaron al coche de policía. Nos felicitaron:
Gracias por ayudarnos a pillar a estos delincuentes, - nos dijeron - parece
que el cabecilla es el tal Dani y que a Don Carlos solo le contrato.
Eso lleváoslos -dijo Mario como si fuera el jefe de los polis.
Oye,-dijo Celia con gracia-que no eres el jefe de los polis.
Todos nos pusimos en un círculo y pusimos nuestras manos en el
Centro y gritamos:
¡POR LA PROXIMA AVENTURA DE 5C!
FIN
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